Seguridad Nacional avisó a Sánchez del alto riesgo del Covid el día que Yolanda Díaz lanzó su guía
Las palabras de Yolanda Díaz asegurando que ella «veía lo que iba a pasar» con el Covid antes de las manifestaciones de 8 de marzo de 2020 y que pese a ello fue acusada de «alarmista» han provocado un terremoto en el seno de la coalición de Gobierno. Pero Díaz -que luego asumió sin rechistar la orden de silencio de Moncloa- no fue la única que avisó de los riesgos de la pandemia. Pedro Sánchez tenía ya sobre la mesa las alertas de los organismos internacionales -la propia Organización Mundial de la Salud ya había calificado el 30 de enero al nuevo virus como «una emergencia de salud pública de importancia internacional»- y también del departamento de Seguridad Nacional, adscrito al Ministerio de la Presidencia.
Precisamente, el mismo día que Trabajo editaba su guía para que las empresas abordasen el coronavirus -el 4 de marzo- la nota de Seguridad Nacional se hacía eco de la calificación de riesgo de la Agencia Europea para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC): «El riesgo asociado para la población se considera actualmente de moderado a alto, el riesgo de aparición de grupos similares a los de Italia se considera actualmente de moderado a alto, el riesgo para aquellas personas que viajan / residen en áreas con una supuesta transmisión comunitaria es actualmente alto». El texto también destacaba que «si se produjera un aumento significativo en los casos de Covid-19, y coincidiera con un nivel alto de gripe, el impacto potencial en los sistemas de salud sería de moderado a alto».
Precisamente, la propia agencia sanitaria europea ya había advertido aquella semana de la necesidad de «evitar concentraciones masivas innecesarias» como medida de prevención. Pese a ello, como es de sobra conocido, el Gobierno siguió jaleando y alentando las manifestaciones del Día de la Mujer, que contaron con una nutrida representación de ministros. En la antesala de aquellas marchas, Fernando Simón afirmó: «Si mi hijo me pregunta si puede ir le diré que haga lo que quiera».
Pero el aviso de la UE ya atisbaba el gran riesgo del nuevo virus y, más aún, de su propagación en entornos de gran afluencia, por lo que, para el ECDC, la cancelación de eventos masivos contribuiría a frenar la difusión.
Seguridad Nacional recogía aquel 4 de marzo que Sanidad había decidido mantener el «escenario de contención». El Ministerio sí anunció algunas medidas, como la celebración a puerta cerrada de eventos deportivos profesionales con alta presencia de público de zonas de riesgo, como Italia, China, Japón, Corea del Sur o Singapur y se había ordenado también suspender los seminarios y congresos de profesionales sanitarios. «Puesto que es necesario que estos se encuentren disponibles», rezaba la nota de Seguridad Nacional.
Cancelación de eventos
Aquel día, se informaba ya a Sánchez de que el total de casos confirmados a nivel mundial era de 93.076 y el de fallecidos, de 3.202. Italia registraba ya 80 muertos. Los casos se reportaban ya por casi todo el mundo.
En España, el total de infecciones ascendía a 198, con un fallecido en Valencia. Por entonces se sabía ya que ese paciente había muerto el 13 de febrero y que «al ampliarse la definición de caso se ha considerado un caso positivo», según recogió también Seguridad Nacional.
El departamento llevaba ya semanas informando en sus notas diarias sobre la evolución del Covid que, a la vista está, resultaba ya de enorme importancia. De hecho, antes del 8 de marzo, Seguridad Nacional se hacía eco en sus informes de que otros países europeos empezaban a reaccionar contra el coronavirus con la cancelación de eventos masivos. El Gobierno, en cambio, decidió ignorar esos precedentes.
Así, el 25 de febrero -como informó este periódico- el departamento recogía que las autoridades de Salud Pública de Italia habían puesto en marcha «medidas de contención» en determinadas áreas y municipios. Entre esas medidas figuraban las «restricciones de actividades públicas», culturales, recreativas, deportivas, religiosas y escolares. El 1 de marzo, avisaba también: «Ante el aumento de número de casos, el Ministerio de Sanidad de Francia comunicó la prohibición de eventos que congregan a más de 5.000 personas en recintos cerrados y la cancelación de la media maratón de París, que iba a tener lugar hoy. Esto se suma a la cancelación del Salón del Automóvil de Ginebra, cuya celebración estaba prevista la próxima semana. Además, las autoridades alemanas decidieron la cancelación de la Feria de Turismo de Berlín por la creciente expansión del virus».